Dos años más tarde se tomó el control radiográfico de la Fig. 251 en el que se aprecia una neotrabeculación ósea completamente normal en el lugar destruido por la lesión. Esto ha sido posible por la acción a distancia de la PASTA F.S. que permanentemente libera moléculas de yodo que pasan a lo largo del instrumento fracturado produciendo la destrucción de los microorganismos del conducto y la vida bacteriana que pudiera existir en la lesión apical distante.
Este cuarto problema de la endodoncia, de los instrumentos fracturados, deja de ser problema cuando se usa PASTA F.S.
PERFORACIONES IATROGENICAS
El problema de las perforaciones iatrogénicas, desde luego accidentales, ha sido considerado por todos los tratadistas como de capital importancia, en términos tales, que GROSSMAN ha llegado a decir: “el mejor tratamiento para perforación es su prevención”.
Todos los autores están de acuerdo en que uno de los factores más importantes del éxito en el tratamiento de una perforación traumática, es la prontitud con que se trate para evitar la contaminación e inflamación tisular.
Este tipo de perforaciones puede tener lugar en la cámara pulpar o en los conductos radiculares. En la cámara pulpar sucede generalmente en los molares y pueden ser originadas por fresas o por instrumentos endodónticos.
El tratamiento tradicional de este problema es la cirugía a colgajo, osteotomía y sellado con amalgama de plata; pero para que esto sea posible se requiere visualización del lugar perforado, pues de lo contrario hay que recurrir a la radicectomía o hemisección radicular. Estos “falsos canales” como los llaman en Francia, son considerados por INGLE 105 como una perforación más, cuando se refieren a la ampliación del foramen apical, lo que da idea de la calidad del problema.
NICHOLLS 106, STROMBERG 107, HARRIS 108 y muchos otros recomiendan, desde la condensación de gutapercha, mezclas de resinas y gutapercha con cloroformo, hasta varios tipos de cementos de hidróxido de calcio y eugenol – zinc. Pero la mayoría de los investigadores ante los fracasos con otros métodos, se deciden por el acto quirúrgico y el sellado con amalgama, entre estos MAISTO 107, LUEBKE y DOW 110 y WEISMAN 111 y hay quienes, como ESPINOSA DE LA SIERRA 112 llegan a la reimplantación como recurso extremo. |