Cuando se tratan molares, especialmente de difícil acceso (Fig. 38), segundo y tercer molares superiores, se practica una técnica similar a la anteriormente expuesta, pero en estos casos el material se presiona con una torunda de algodón como quiera que la cámara pulpar es más amplia. En el primer intento (Fig. 39), se obturó con relleno completo el tercer molar de conductos fusionados y el segundo molar, también con conductos fusionados, se muestra con la PASTA F.S. en el tercio medio. Al agregarse más material y presionarse de nuevo con torundas de algodón se logró el relleno completo que muestra la Fig. 40.

UN CASO CLINICO

Tomamos del Journal de la American Dental Asociation la secuencia de la Fig. 41 que muestra en la parte superior izquierda un primer molar inferior de una mujer de 26 años en el que se aprecia una lesión que se extiende a todas las zonas apicales. En la radiografía de la mitad se muestra una obturación completa efectuada con todas las normas convencionales.

La placa del lado derecho señala un crecimiento de la lesión un año después, por lo que se procedió al curetaje apical. La radiografía de la parte inferior izquierda tomada seis meses después de la cirugía, indica una notable regresión de la patología, y la placa radiológica del lado inferior derecho, de otros seis meses después, muestra una normalización total de todos los tejidos.

Este caso y muchos otros más de ocurrencia diaria, demuestran que por el solo hecho de hacerse una obturación radicular completa no va a obtenerse la eliminación patológica, en cambio cuando la obturación se lleva a cabo con una fórmula como la PASTA F.S. tal como el lector acaba de observarlo en el presente título, la eliminación de la patología siempre tiene lugar, y sin ninguna intervención quirúrgica. Confiamos en que algún día los odontólogos se concienticen, y actualicen sus conocimientos aceptando las ventajas de esta fórmula.